La fruta NO te hace engordar. Es otro mito

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By Redacción

En reuniones con amigos o en conversaciones sobre dieta, seguro que alguna vez has escuchado frases como: “la fruta engorda” o “tiene demasiado azúcar”. Estas afirmaciones, aunque comunes, se basan en mitos que han calado profundamente en nuestra percepción de la alimentación saludable.

Lo curioso es que, mientras los expertos en nutrición defienden la fruta como un alimento esencial en cualquier dieta, muchos artículos y recomendaciones en Internet aseguran lo contrario, clasificándola como un enemigo de la pérdida de peso. Pero, ¿realmente la fruta engorda? Vamos a desmontar estos mitos y a entender por qué la fruta siempre será una opción más saludable que cualquier alimento ultraprocesado.


Las falsas creencias sobre la fruta

  1. «La fruta tiene mucho azúcar y engorda».
    Aunque contiene azúcar, este es natural y no comparable al añadido de productos ultraprocesados.
  2. «Comer fruta por la noche hace que se convierta en grasa».
    No hay evidencia científica que respalde que el momento del día afecte a cómo el cuerpo procesa la fruta.
  3. «La fruta engorda siempre».
    La fruta es baja en calorías, rica en fibra y agua, lo que la hace saciante y saludable.

La comparación: fruta vs brownie

Para entender por qué la fruta no engorda como dicen, comparemos un plátano con un brownie:

  • Plátano (100g):
    • 74% agua.
    • 12g de azúcar natural.
    • 89 calorías.
    • Rico en fibra y nutrientes.
  • Brownie (100g):
    • 7% agua.
    • 50g de azúcar añadido.
    • 466 calorías o más.
    • Sin apenas fibra ni nutrientes.

Conclusión: el azúcar de la fruta no es comparable al de productos ultraprocesados. Además, su contenido en fibra y agua la hace más saciante y nutritiva.


Por qué se culpa a la fruta

  1. Demonización de los hidratos y el azúcar.
    Antes el enemigo eran las grasas, ahora son los azúcares. Sin embargo, ningún nutriente es «malo» en una dieta equilibrada.
  2. Necesidad de buscar culpables.
    Es fácil culpar a la fruta cuando el problema real es una dieta desequilibrada y un estilo de vida sedentario.
  3. Intereses comerciales.
    Culpar a la fruta ayuda a vender productos «milagrosos» que prometen adelgazar sin esfuerzo.

Consejos para incorporar fruta a tu dieta

  1. Prefiere la fruta entera.
    Los zumos eliminan la fibra y aumentan la cantidad de azúcar ingerida.
  2. Elige la fruta que te guste.
    No necesitas buscar «frutas de moda». Las de toda la vida son igual de buenas.
  3. Revisa los productos con fruta.
    No todo lo que lleva fruta es saludable; verifica los ingredientes.

Conclusión: más fruta, menos mitos

Comer fruta no engorda. Lo que realmente afecta al peso es una mala alimentación, el sedentarismo y las cantidades excesivas de comida ultraprocesada.

Empieza por añadir 2 piezas de fruta al día, especialmente como sustituto de dulces o snacks menos saludables. Tu cuerpo lo notará.

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