La mayoría de nosotras tenemos el pelo teñido. De un color u otro, pero solemos darle a nuestra cabellera unos reflejos y unos tonos que nos gustan y que nos hacen sentir más guapas, y por lo tanto más seguras. A medida que las investigaciones científicas sobre el color del cabello han ido avanzando, la composición de los tintes también ha ido modificándose. Echan unas gotas de esta esencia, una pizca de otra, le ponemos una base de algo que a saber qué será… Leemos los ingredientes del tinte y nos quedamos horrorizadas de cómo aún no se nos ha caído el cabello a mechones.
Todo tiene una base científica. Las fórmulas son elaboradas con ingredientes que combinados entre sí, nos dan un aspecto hidratado, reluciente y del color que queremos. Pero siempre se puede mejorar. Y es que si el color viene en un bote que he comprado, ya sabemos que no tiene nada de natural. Por mucho aceite de jojoba que dicen que meten, puede ser verdad o no.
Por eso te traigo una serie de formas naturales de conseguir el tono de cabello que quieres, sin tener que echarte esa masa química por la cabeza:
Utilizando limones
Para teñirte de rubia, podemos acudir a los aclarados naturales en donde el limón, la cerveza, la miel serán nuestros aliados, consiguiendo reflejos dorados propios y muy naturales sin tener que echarnos químicos ni enfrentarlos a los daños. Si decides seguir el camino rubio, recuerda que suele resecar un poco el pelo, así que no olvides siempre una buena mascarilla hidratante de medios a puntas y no hacerte el tratamiento dos días seguidos.
Para conseguir los tonos rojizos naturales, sólo tenemos que coger el jugo de un par de remolachas. Así tal cual te lo digo. Su color rojizo es natural y es un producto de la madre naturaleza. Sólo tienes que terminar de lavarte el cabello, escurrirlo, colocarte una toalla a los hombros bien y echarte el jugo con cuidado. Cuando te lo hayas echado, deja tu melena al sol, que se vaya secando poco a poco. Dale una media hora y luego vuélvelo a enjuagar. Háztelo cada vez que te vayas a lavar la cabeza. En un par de semanas, empezarás a ver los resultados. Ya depende de ti lo intenso que lo quieras. Si lo quieres más rojo, sigue aplicándotelo durante más tiempo. Cuando hayas conseguido el color que querías, con echártelo una vez a la semana, será suficiente para mantenerlo.
Té negro, tu mayor aliado
Para oscurecer el pelo, necesitarás, productos naturales de color negro. En este caso, el té negro será tu aliado. Tienes que hacer una infusión con la cantidad de agua normal para tu taza de té, pero échale como tres o cuatro sobres más de té negro.
Sólo tienes que comenzar a utilizarlo para el penúltimo enjuague. Escurre bien tu cabello, aplícate la infusión cuando aún esté calentita (no hirviendo) y deja que actúe unos veinte minutos. Cuando hayan pasado, enjuágate el cabello con normalidad. Hazlo cada vez que te laves la cabeza y en un par de semanas verás cómo tu pelo se está oscureciendo.
Henna
Muchas conocen a este milagro de la naturaleza, que ofrece aromas traídos de la India y que llenan nuestro cabello de reflejos naturales. Puedes comprar esta arcilla en muchas tiendas, ya que hay varios tipos de champú que llevan extractos de henna. Pero si lo tuyo es ir por el camino natural, compra las pastillas en Lush. Tienen una gran variedad de productos naturales a grandes precios y además, según tu tipo de cabello, saben aconsejarte sobre lo que más te conviene.
Arcillas
Es un método revolucionario. A través de unas arcillas de barro, cortezas de árboles y plantas, consiguen que tu pelo luzca de manera natural con los colores que más te gustan. Además, se trata de una arcilla muy nutritiva que hidratará a tu cuero cabelludo, reparará los daños en las puntas y lo mantendrá perfecto.
Como ves, hay formas muy variadas de teñir el cabello de manera natural y en los tonos que más te gusten. No tienes por qué exponer tu cabello a químicos y a demás agentes dañinos. La belleza natural viene de la naturaleza.